¿Por qué Converse?
Mi afición por las zapatillas deportivas Converse se debe exclusivamente a la Publicidad de la gran pantalla.
Al principio la Publicidad que aparecía en los largometrajes se resumía en anuncios emitidos antes o después de estos, para trasladarse más tarde a la televisión y posteriormente volver a los orígenes.
Pero a la que quiero hacer referencia aquí, es la Publicidad implícita en la película, de la cual no hay aviso previo, aparece sin más, bien sea por el reloj, coche del protagonista (véase las películas de James Bond) o vallas publicitarias que sin venir a cuento nos instan a comer en Mc´Donalds, y un largo etc.
Este ultimo tipo de Publicidad empezó tímidamente y ha terminado por afianzarse como recurso cuasi indispensable a la hora de rodar una película, ya que ofrece unos importantes beneficios (y sus consiguientes ventas del producto a posteriori :P).
Concretando, me encontraba yo viendo en el cine el film “Yo, Robot” protagonizado por Will Smith, cuando en una secuencia saca una caja de zapatos del armario (situada junto a otras muchas más), y extrae unas zapatillas Converse de un negro intenso al mismo tiempo que se produce un primer plano del logo en la deportiva y el protagonista elogia el calzado como si de un vino se tratase, hablando del año de fabricación (hay que tener en cuenta que en esa época ya no existía un calzado como ese), de lo increíbles que son, y de la imposibilidad de encontrar más (ya no se fabrican), convirtiendolas en un artículo de lujo, por no decir obra de arte.
Todo esto ocurre en un período inferior a los 12 segundos, más que suficiente para hacerme desear unas con toda mi alma, y plantearme – ¿cómo he podido vivir sin semejante maravilla? -.
Actualmente uso más tipos de calzado además de las Converse, pero (aunque empiecen a estar pasadas de moda) me siguen encantando.
Saludos Buhonianos
Tomás Iliescu desde la Guarida.
La Guarida del Búho 
A esto se le llama «Product Placement» y se hace en el cine, en las series de televisión, y en la vida diaria de los «famosos».
Tú tienes un producto y quieres que aparezca en la vida diaria del protagonista de la serie o película o llamas a Pepito Fernandez y le dices que si lleva tu traje se lo regalas además de regalarle también 3.000 euros. Les ofreces una cantidad de dinero para que aparezca tu marca o tu producto, una publicidad en mitad de la pieza audiovisual. Y lo mismo puede estar en mitad de la escena, que se puede hacer alusión al producto o que lo estén probando (los coches en la pelis, en general).
Esto es un modo de financición muy importante para las películas y que no supone un agravio para el espectador (exceptuando algún caso aberrante).
Vamos, que tiene un nombre («product placement») y que se utiliza muy amenudo… De todas formas lo tuyo me parece exagerado… La intención de esta publicidad es generar imagen de marca y crear pequeños impactos en el público, no creo que te pretenda convencer como otros anuncios de la tele, simplemente quiere que cuando veas el producto en el supermercado ya te hayas imaginado usándolo, no que vayas corriendo a comprártelo xD
Un saludo,
Carlos Prats
Muchas gracias por pasarte Prats, aprecio en demasía tus aportaciones.
No sabía el nombre, y tampoco tenía muchas ganas de buscarlo, más que nada porque si no posteo cuando surge, generalmente lo dejo olvidado XD.
Supongo que la moda del momento, el que las llevaran tanta gente por la calle me hizo pensar en ellas (las deportivas) y la pelicula con su «product placement» puso la guinda al asunto.
Que mente más susceptible tengo. Si ya me lo decía mi padre XDXDXDXD
Saludos Buhonianos.
Tomás Iliescu desde la Guarida
En películas hay que ser fino, no vaya a ser que quede muy cantoso, pero en lo que suelen abusar, es en ciertas series españolas, que mientras sucede una escena en la cocina, hemos visto el brick de Puleva y las galletas Fontaneda XD. Y encima mirando para cámara…
En el caso que dices de «Yo robot», uno dudaría si es publicidad, o es realmente una referencia cultural del guión, pero imagino que realmente, la pasta gansa es muy apetecible.
Hola a todos:
El tema del Product Placement salió en una conversación que mantuvimos en clase el otro día, y me gustaría hacer hincapié en el hecho de que últimamente se está abusando (y mucho) de su uso, sobretodo en las series españolas que mencionaba Zarcaslog antes.
Actualmente podemos ver en capítulos de Física o Química cómo las alumnas del colegio pasean sus bolsas (marca xTi, de zapatos) y sus botas recién compradas durante dos o tres minutos mientras comentan los maravillosos zapatos que han adquirido.
También se han introducido muchos otros productos como los famosos módems USB (Vodafone, Orange, Movistar… ya sabemos) y por supuesto la ya nombrada Puleva.
Según tengo entendido no son precisamente baratos estos «anuncios», pero se me hace raro que traten de introducirlo de esta forma porque sinceramente, yo no compro la marca tal porque aparezca en la serie cual. Otra cosa es el caso de las Converse, que me encantan, pero es otro tema 🙂
De todas formas os felicito por el blog, voy a convertirme en una fiel seguidora aunque se aleje un poquito (nada más) del itinerario académico que tengo.
Un afectuoso saludo:
Clara
Más que insertar sus productos para venderlos, yo creo que se busca más la asociación producto-estilo de vida. En caso de física o química le aporta a la marca ese toque «cool» al relacionarla con el modo de vivir desarrollado en la serie (por mi parte aberrante) creando así la personalidad buscada para la marca.
Thx!!esperamos no defraudarte ^^
Saludos, Guillermo Granados
En «Yo, Robot» la verdad es que queda realmente bien, y no desentona con la película. Creo que ese es el verdadero éxito del product-placement.
Yo no me suelo llevar por modas y anuncios, pero si que reconozco cuando algo ha dejado huella en mí.
Mientras solo sean bienes materiales, no hay problema 🙂
Muchas gracias por postear Andrés.
Muchas gracias por postear Atenea. Es un verdadero placer tenerte de lectora en el blog clarita. A ver si animas a la panada de vagos de tu clase a visitarnos y además a crear su propio blog.
Saludos Buhonianos.
Tomás ILiescu desde La Guarida.